lunes, diciembre 21, 2009
20 de Diciembre - BeelZebul
Gracioso. Recuerdo haber leído el recordatorio en un parte de prensa del festival. Rezaba algo así: “7 de la tarde. Después no digan ‘uhh llegue tarde’. Con voluntad se llega puntual...”. Dado que estamos en la ciudad de Salta no es para nada alarmante (nadie se alarmó en realidad) que el INTI ROCK lanzará sus primeros acordes recién dos horas después. Quizás fue uno de los varios problemas que sufrió el equipo encargado del sonido, varios en la prometedora noche. Durante la paciente espera, la joven y palpitante audiencia estuvo afuera mientras las pruebas correspondientes se llevaban a cabo. Algo de lo que venía ya se percibía en el ambiente a cielo abierto. Al abrir las puertas, ingresé armónicamente al local ‘balcarcero’ y minutos después el INTI ROCK se dió por oficialmente iniciado. Este festival de rock, que se viene realizando desde hace algunos años, tuvo por objeto “celebrar la unión cultural de la música alternativa como reflejo social y contemporáneo, y el orgullo que conlleva ser un nativo del norte argentino”. Creo que todo festival, de cualquier tipo o disciplina, conlleva siempre la reunión de gentes de diferentes orígenes, costumbres, edades, estratos, por nombrar algunas de las tantas categorías existentes. Y las bandas de rock en este caso, que representan muchas veces esos propuestos lugares imaginarios, fueron seleccionadas con justeza. El organizador Calmaniño, junto a Santo Domingo, Madre T-Rezo, Luca Makonia y Las Shells (Tucumán), además de difundirse un poco más en la luchada escena local, propusieron el marco ideal para una noche de respeto y colaboración entre los presentes. De frente al escenario INTI ROCK, me sorprendí con la multitud de jóvenes, algún que otro adulto, grandes grupos de amigos, un extranjero dando rienda suelta a su escaso castellano, familias enteras y hasta niños arriba del escenario. Hubo de todo a decir verdad. Mucho rock, reggae, punk, ska, raggamuffin, metal, hardcore. Si me olvido de algún estilo es porque no lo conozco, no me llega a la memoria, o porque está tan imperceptiblemente fusionado entre otros, como la atmósfera que se vivió durante más de 4 horas de música. Rock del norte aceptado y agradecido con todas letras por un público muy entusiasta (acalorado), que apoya lo conocido y las nuevas propuestas como es el caso de la precoz banda tucumana. Con puestas en escena más elevadas que otras, con cancionero nuevo o con viejos clásicos pedidos por el público, con frontmans más didácticos, letras por lo visto pegadizas (“quereme mucho”) o con un (a mi parecer) sonido favorecido para pocos; todas las bandas al final rugieron a su manera. Pienso ahora que el INTI ROCK demostró la fuerte multi personalidad y actitud que persiste en la ciudad salteña. El punto que flaqueó el evento salió a la luz cuando se azotó al público con grandes bolas de ruido acoplado. El técnico en la consola, recordado hoy solo por los adjetivos que recibió su madre, por momentos no pudo contenerlas provocando casi el éxodo masivo. Un mejor trabajo en videos y visuales pudo haber ayudado, más algún relleno en los intervalos que haga alusión a la iniciativa INTI ROCK. Terminando el 2009, y con el cierre obligado de la temporada musical encima, las bandas y la gente se dieron el gusto. Sería interesante tener más bandas de la región en las próximas ediciones y la conformación de un nuevo núcleo en el mapa musical. Un punto donde las grandes urbes argentinas miren un poco más hacia arriba. Creo que el rock alternativo en el norte tiene nombre y no creo que haga falta repetirlo.
Federico Rodríguez Lescano
martes, diciembre 15, 2009
Gardenia
Invocación a los pájaros LP
Independiente - 2009Esperado disco debut que, después de tantas idas y vueltas, define el presente musical con canciones tipo exportación.
Dejando de lado el costado burocrático de su gestación, el primer larga duración de Gardenia nació y trajo consigo un nuevo sonido. Si bien la entramada composición de sus canciones ha sido una constante frecuentada en su producción, Invocación a lo pájaros se reluce entre todos sus trabajos por una mayor unidad o una aparente conceptualización musical. Con una nueva formación de integrantes y una cambiante complejidad, es perceptible el avance incansable de la banda, tanto en lo individual como en el plano colectivo, ya que con la inclusión del bandoneón for export y el bombo legüelo, se demarcó el nuevo horizonte musical. Mucha energía regada con tintes de rock, jazz y folklore, más sus variantes siempre presentes. Con guitarras más creativas y una menor intervención de teclados con respecto a los anteriores EPs, desde una atenta escucha se percibe una tarea de investigación sonora. De ella se perfila el concepto musical basado en un espíritu hi-fi, elegante, pero con una fuerte y obstinada solidez metal acompañada siempre de melodías suaves que se desprenden de todo el armazón. Entre las canciones, Mammatus replica a latentes grupos como Battles o Pivot, con el auge instrumental rockmatemático que los caracteriza; o Golem, que propone imaginarnos a un ferviente Tool dando recitales por el norte argentino después de algunas semanas de estadía. La grabación, realizada en un estudio local, tuvo como único invitado al Gnomo, cantante de Calmaniño. Con su timbre o frecuencia vocal podridos, como recurso original, por un lado dió un toque más que agresivo y positivo a temas como Se hagan vida. Tras repetirse en otras intervenciones, provocó poca sorpresa y baja eficacia. En el aún perfectible trabajo de post-producción, donde las voces y los coros jugaron un papel importante, se rescataron la multiplicidad de quiebres justos, ciertos loops magnéticos, resonancias desconocidas, efectos reversibles y una claridad auditiva no antes descubierta en la banda. Es loable también que canciones antiguas como Viento y viajar o Donde el mar, con el tiempo y buenas ideas, se fueron perfeccionando en el registro final. Las letras impresas por Iván Luis, líder de la banda y responsable de la palabra cantada, fueron apoderas por el viento. Ese ser o ente que se lleva todo por delante aunque también trae cosas nuevas, casi como producto del aleteo de los pájaros invocados. Analogía perfecta para este álbum debut. ¿Un disco de culto? ¿Vanguardia local? No lo sé. Solo sé que los once temas están aún sin editar físicamente, por ahora para bajar desde la red, pero siempre a la espera de lo que vendrá.
Federico Rodríguez Lescano
Gardenia se presentará en vivo el próximo sábado 23 de enero en el Festival Rock del Valle. Para más información de la banda, ingresa a http://www.myspace.com/gardeniaespacial